Cántara da Moura
En nuestra ruta de hoy os llevamos a conocer la Cántara da Moura, el hogar de un ser mitológico gallego. Y no eligió mal lugar, ya que se encuentra al final de una bonita ruta en el concello de A Veiga, en una cueva dentro de una roca por la que pasa el río Corzos. No pinta mal, ¿no? Pues vamos allá.
Cómo llegar
El comienzo de la ruta está un poco al sur del embalse de Prada. Si viajas desde cualquiera de las ciudades gallegas tienes que la Playa de los Franceses y el puente que cruza el embalse. En el siguiente cruce giramos a la derecha y a pocos metros ya vemos la zona de aparcamiento y la señalización del inicio de la ruta hacia la Cántara da Moura.
La ruta
Después de aparcar el coche comenzamos a andar por el camino que conduce hasta la Cántara da Moura. Las hojas caídas, en una estampa típica de otoño, y los carballos que bordean el sendero ya nos hacen presagiar lo bonita que va a ser esta ruta.
Continuamos caminando hasta que nos encontramos un cartel que indica el camino primitivo y el camino nuevo, el cual elegimos. Poco después vemos un puente de madera que nos permite seguir la ruta.
La zona está llena de grandes bolos graníticos, que le dan un aspecto singular al paisaje, y de cuevas. Dos de ellas sirvieron como refugio para los maquis, la resistencia antifranquista que después de la Guerra Civil se echó al monte y practicaban la guerra de guerrillas.
Una de estas cuevas es la Cova dos Escapados, el lugar donde se refugiaron muchos de los escapados pertenecientes al bando republicano. A la cueva solo se puede acceder por un pequeño agujero, en el que colocaban una escalara para bajar que luego retiraban. Se podían pasar semanas sin salir de ella, ya que el río pasa por el interior y podían pescar truchas con las que alimentarse.
Otra de estas cuevas es O Cubo, lugar idóneo para ocultarse ya que cuenta con 7 entradas distintas, por lo que les permitía tener varias vías de escape en el caso de que encontrasen su escondrijo.
Más adelante nos encontramos con una pasarela de madera que nos lleva hasta el final de la ruta. Se puede discutir si la madera es la mejor solución en una zona de lluvias y humedad como es Galicia, pero lo que no admite discusión es de lo fotogénica que queda.
Y llegamos así hasta el Santo Grial de la ruta, la Cántara da Moura. Quizás lo primero sería contaros lo que es una Moura, seres mitológicos que habitan en Galicia y el resto de países célticos. Se trata de de seres sobrenaturales que acumulan riquezas, sobre todo oro. Viven alejadas de los humanos, tanto debajo de ríos y lagos como en cuevas, dólmenes o castros. Son esbeltas, de piel clara y con cabellos dorados, y pueden poner a prueba la inteligencia o la bondad de las personas con las que se crucen. Pero vamos a contaros la historia de nuestra Moura.
En el interior de esta cueva habita una bellísima moura. Cada amanecer sale de su guarida y se sienta en un lado del río a peinar su cabellera con un peine de oro. Cuando las chicas del pueblo pasan con el ganado la moura deja caer su peine. Si la joven se para y recoge el peine, la moura la premia con unas monedas de oro. Pero si no se para y prosigue su camino, el castigo por su desdén es convertirse en una roca como las muchas que hay en el lugar.
En la cueva se ve claramente la forma de la puerta, que hasta parece hecha artificialmente. Ahora solo nos queda regresar por el mismo camino para terminar la ruta.
Si nos quedamos con ganas de más, en la zona hay numerosas rutas muy atractivas. Una de ellas es la que asciende hasta Pena Trevinca, aunque es bastante exigente. Otra es la Senda Verde do Xares, una ruta circular de 34 kilómetros que rodea el embalse perfecta para recorrerla en bici de montaña.
Viajando A Mi Manera
Una ruta de lo más interesante, tanto por la localización como por las leyendas de estos lares, algo bastante común en tierras gallegas. En verano hice una ruta por la zona de la Costa Ártabra de Ferrolterra en la que también se hablaba de una moura, aunque en este caso, intentaba atraer a los muchachos jóvenes.
Como bien apuntas, las pasarelas de madera pese a ser bonitas pueden ser peligrosas con la humedad, pero imagino que las pondrán así para que se integren mejor con el entorno y sean más «ecológicas».
Lo bueno es que se pueden realizar rutas complementarias como la del Xares o la de Pena Trevinca, aunque para ello hay que estar en buena forma física, puesto que son bastantes kms. Queda apuntada para cuando vuelva a la provincia de Ourense, puesto que esa zona me es totalmente desconocida. Un saludo
DinkyViajeros
Nos ha encantado esta ruta de Cántara da Moura. Precisamente este año hemos estado buscando lugares así, con poca masificación de turistas y aire limpio, para disfrutar de nuestra vacaciones… Así que nos guardamos el post para 2021, que probablemente también sigamos con la pandemia y las mascarillas. 🙁
Ya que nosotros no somos de Galicia, ¿dónde nos aconsejas buscar alojamiento?
Saludos.
Viajando el Mapa
Pues nosotros nos alojamos muy cerca de la ruta, en el Eido das Estrelas, una preciosa casa rural muy bien atendida y con una cocina excelente. Por los alrededores también hay otras casas rurales muy cuidadas que seguro que os encantan.
A mamá le gusta viajar
Hola!
Por más veces que vaya a Galicia, siempre hay sitios que hacen que quiera volver.
Estás rutas son preciosas. Me encantan los senderos con pasarelas de madera y que van a la vera de algún río. Además, parece una ruta cómoda y fácil que se puede hacer con niños pequeños incluso.
Otro de sus atractivos es la historia y la leyenda.
Apuntamos la ruta para nuestra próxima visita a la comunidad.
Un saludo
Maruxaina Bóveda
Qué bonito…He disfrutado haciendo esta ruta leyéndoos. Con resbalón incluido en el fotogénico puente de madera 😉
Es alucinante que no haya un «recuncho» gallego sin leyendas o historias que contar. No conocía la Cántara da Moura así que añadida queda a la lista interminable de lugares que visitar en Galicia.
Un abrazo y a seguir descubriéndonos «a nosa terra».