En las antípodas
En Australia puedes morir de muchas formas: por la picadura de una medusa cofre, abierto en canal por un casuario, por el veneno de las serpientes verdes arborícolas, por un pulpo de anillos azules, devorado por el cocodrilo de agua salada, por el aguijonazo de una raya eléctrica, pisando un pez piedra… y aun así es un país espectacular. Lo hemos visitado desde la comodidad de nuestra casa gracias a En las antípodas, uno de los libros de viaje que ha escrito el genial Bill Bryson.
El autor
Bill Bryson es un escritor estadounidense que ha estado viviendo entre Estados Unidos e Inglaterra la mayor parte de su vida. Empezó en el mundo del periodismo pero lo abandonó (llegó a ostentar cargos importantes en The Independent y The Times) para centrarse en su faceta de escritor. Aunque destacamos y nos centramos en en sus libros de viajes, también ha escrito (y ha sido galardonado por varios de ellos) libros sobre lengua inglesa y sobre ciencia (como el muy reconocido Una breve historia de casi todo). El humor y la curiosidad son cualidades inherentes al autor que podremos ver reflejadas en En las antípodas.
El libro
Una de las primeras cosas que nos recuerda el autor es que apenas sabemos nada de la isla más grande del mundo (y sexto país por tamaño). ¿Quién es su presidente? ¿Podéis mencionar más de 4 ciudades del país? Nosotros, como la mayoría, no fuimos capaces de contestar a estas preguntas hasta que leímos al genial Bill Bryson. El autor intenta explicarnos cómo funciona el sistema político australiano (algo que ya nos dice que es imposible antes de empezar la explicación) e intenta que visualicemos la inmensidad del devastador outback australiano (solo un ejemplo: los dos aventureros más famosos del país, Wills y Burke, fallaron en su intento de cruzar el país de sur a norte, y su fracaso les costó la vida...). En su ambicioso recorrido (pasando por sitios tan distantes como Darwin y Brisbane) habrá tiempos para el viaje en solitario, para reencuentros con viejas amistades y hasta para un par de semanas viajando acompañado por su amigo Allan Sherwin.
En conclusión, un libro muy divertido para conocer Australia (aunque cuando visitemos el país estaremos un poco paranoicos buscando insectos y animales asesinos y nos pensaremos más de una vez probar el agua de sus playas). ¡Hasta el próximo libro!